Monday, March 28, 2016

¿En dónde quedó la tolerancia?

En la tarde de hoy, cuando iba de camino a buscar a mi hija mayor a su escuela, atravesé algunas dificultades para poder llegar a mi destino. Dificultades que me desconcertaron un poco y me incomodaron, eso tengo que admitirlo.

Mientras esperaba por mi hija, medité acerca de lo ocurrido y procedí a realizar la siguiente pregunta, ¿en dónde quedó la tolerancia?

¡Qué poca tolerancia hay hoy en día en las carreteras y en las calles de mi país Puerto Rico! Y digo mi país, porque es aquí en donde vivo. Ya no hay seguridad para aquellos conductores que nos gusta cumplir con las leyes de tránsito.

Se nos hace difícil manejar en la carretera. Nos tropezamos con personas que no utilizan las señales para cambiar de carriles, no obedecen los pares, no se detienen ante los semáforos y te gritan si lo haces o si esperas mucho tiempo luego de haber cambiado la luz.

¿Y qué me dicen de la bocina? ¡Ya le tengo pánico! La tocan sin parar hasta que logran alcanzarte o moverte de lugar con el ruido y lo peor de todo, es que lo disfrutan. Y si por alguna razón te toca apretar la misma bocina, estás casi muerto, porque te mencionan cuanta palabra encuentran y aun las que no se han inventado.

Personas que se atraviesan en tu camino, conducen a exceso de velocidad y si por alguna razón no le cedes el paso, te insultan con palabras soeces, o tratan de intimidarte, te persiguen con sus vehículos, o pegan los mismos al tuyo sin consideración alguna, para ocasionarte miedo.

No se preocupan por su bienestar y seguridad, mucho menos por la de los demás.

¡Es increíble que manejar en estos días se convierta en un lanzamiento al campo de batalla! En donde tienes q estar alerta ante todo.

Tienes que contar con la capacidad de manejar tu vehículo y el de los que te rodean. Actúan como si nunca fueran a llegar a su lugar de destino  y provocan en los demás, ansiedad y temor.

¡Esto es en realidad terrible! Pero ante la poca tolerancia que existe en las carreteras, tenemos que seguir dando ejemplo para ver si a través de nuestras acciones podemos lograr que otros nos emulen.


Sunday, March 6, 2016

7 de marzo de 2010

Este día celebro los 6 años de vida de un ser sumamente importante para mí. Un niño muy especial el cual me ha hecho ver la vida de manera diferente. Con él he aprendido a desarrollar mucha más tolerancia y a través de él he aprendido que no hay nada imposible para Dios.

El hombre o la ciencia pueden decir lo que deseen de acuerdo a sus conocimientos, pero quien puede creer en Dios recibe grandes milagros. Yo he creído en Dios y he recibido grandes milagros.

La vida me ha premiado con su presencia y aunque otros no comprendan su manera de ser, de actuar, de comportarse, de observar, de reaccionar, yo lo amo por encima de lo que el mundo pueda pensar o decir y le resto importancia a lo demás.

Agradezco a Dios porque luego de tenerlo conmigo la muerte intentó arrebatarlo de mi lado cuando tenía sólo 4 años y no lo logró.

Su sonrisa, sus palabras aunque sean pocas, su mirada, sus abrazos, su manera de dormir, de llorar de quejarse y de actuar cada día me hace más fuerte y me permiten amarlo más, me enamoran.

En mí no existen los cuestionamientos, no existe el por qué, sino el cómo. En realidad no me interesa saber el por qué. Es un regalo maravilloso.

Dios coloca a nuestro lado a personas especiales para que aprendamos de ellas en el camino y él llegó a mi vida ese 7 de marzo de 2010 para enseñarme a ver la vida de manera diferente, para ayudarme a crecer, a madurar y a valorar.

Hoy reconozco que mi vida sin él estaría vacía, que lo amo con todas las fuerzas de mi corazón y las de mi alma y que es totalmente indescriptible este amor que siento por él. Que de todo lo que quiero lograr y alcanzar en la vida su hermana y él son la parte primordial, mi foco, mi todo.

En este día quiero decirle que le pido a Dios que me permita verlo crecer y acompañarlo en este proceso que se llama vida del cual poco a poco he ido preparándolo con la ayuda de grandes seres importantes y especiales que han formado parte de su crecimiento.

Aun le quedan muchos logros y metas por alcanzar y ahí estaré si Dios me lo permite caminando en donde él quiera que camine para verlo triunfar, para verlo volar.


¡Te amo Luis Miguel Mercedes Santiago!!!!! Mi eterno bebé, 6 años de vida.

Ser diferente


Ser diferente no es ignorar, rechazar o juzgar a otras personas porque no son como  nosotros, porque no piensan como  nosotros, porque no comparten nuestros mismos intereses.

La diferencia consiste  en ser nosotros mismos, apoyando las buenas  acciones de otras personas y educando a quienes realizan malas acciones para que  aprendan de las mismas y no las vuelvan a repetir. Significa  compartir con las personas, pero  no necesariamente compartir sus ideales.

Ser diferente es concientizar a otros sobre el amor, la comprensión y la tolerancia. Es saber escuchar sin juzgar y/o condenar. Es tener la capacidad  de brindar una oportunidad a quien nos falló alguna vez y permitirle enmendar su error.

Hacemos la diferencia cuando no actuamos de la manera esperada en diferentes situaciones. Cuando podemos trabajar con la diversidad que a otras personas les incomoda. Cuando muchos esperan  de nosotros el rechazo y reciben aceptación. Cuando pronunciamos palabras de apoyo y solidaridad ante un problema y no lo hacemos de manera acusatoria.

Es ser nosotros mismos respetando la dignidad y el valor de cada  ser humano. Reconocer que  en algún momento  el ser humano puede caer  pero  tiene el derecho a levantarse. Y estar conscientes de que como seres humanos, también podemos tropezar y caer.

Es llegar en ese preciso momento para extender la mano al caído para que  pueda  levantarse y no pisarlo para que  jamás se  recupere.

Reconocer que  no podemos oprimir a nuestros semejantes a través  de nuestras actitudes y no permitir la opresión por parte  de otras personas.

Siempre debemos tener presente que ser diferentes implica salirnos de las normas, de lo que está estipulado. Distinguirnos en cuanto a conducta, comportamiento, manera de actuar, de vestir, de expresarnos, manera de conducirnos.

Cuando no atacamos lo que todos atacan, cuando no nos unimos a burlarnos de otras personas para sentirnos parte de un grupo y/o aceptados. Cuando defendemos los derechos de las personas en el momento en que han sido violados, cuando analizamos, estudiamos e investigamos antes de actuar. Cuando tenemos la capacidad de escuchar las partes envueltas en un problema y actuar de manera imparcial. Cuando podemos desempeñarnos como abogados y no como jueces y cuando promovemos la justicia social y la integridad de las personas, podemos decir que somos diferentes.

¡Les invito a ser diferentes!